Los agentes del Instituto Nacional de Migración (INM) “nos prometieron que nos iban a llevar a la Ciudad de México, pero cuando llegaron los autobuses dijeron que no y nos dividieron y trasladaron a diferentes lugares, unos a Arriaga, otros a Tuxtla y otros a las calles”, acusó la migrante hondureña Elizabeth Ulloa, quien junto a unas 2 mil personas reanudó su camino rumbo a la frontera con Estados Unidos en la caravana “Éxodo de la pobreza”.
La caravana, que fue dispersada por las autoridades y elementos del INM el pasado 2 de enero con la falsa promesa de que les entregarían documentación, avanzó este 8 de enero por la costa de Chiapas rumbo a San Pedro Tapanatepec, Oaxaca.