Tres jóvenes que buscaban empleo viajaron de Sonora a Colima para trabajar en una empresa agrícola, pero todo era un engaño de un grupo criminal para reclutarlos.
La necesidad de un trabajo bien remunerado es aprovechada por los grupos criminales en México, quienes se valen de las redes sociales para cooptar a sus víctimas y, una vez que caen en su engaño, las obligan a trabajar para el narco, tal como ocurrió en Colima con tres personas procedentes de Sonora.
Después de que se denunciara la desaparición de las víctimas, las autoridades consiguieron localizar a los tres jóvenes, uno menor de edad, quienes habían partido de Hermosillo, Sonora, hacia Colima con la promesa de un empleo bien pagado.