La exjefa de Gobierno inicia oficialmente su campaña con una estela de inconformidades y descalabros al interior de su partido, bajo la sombra de la tragedia en la Línea 12 del Metro y señalada por el INE de ser la que más gastó en el proceso interno de Morena y en pintas en bardas y espectaculares.
Con más de un año y medio de proselitismo por todo el país, con el apoyo presidencial y de todo el aparato de Estado, como ocurría en los tiempos del PRI; así como con una estela de irregularidades electorales y una ola de violencia política en el país, ayer viernes 1 de marzo, Claudia Sheinbaum Pardo arrancó, de manera oficial, su campaña presidencial para las elecciones del próximo 2 de junio.
En un Zócalo abarrotado por el conocido “acarreo” de miles de personas, la morenista enlistó los 100 puntos que comprende su propuesta de gobierno 2024-2030. Entre ellos destaca la iniciativa de reforma constitucional para eliminar la reelección de diputados y senadores, según lo adelantó ella misma en un inusual carrusel de entrevistas, la mayoría “a modo”, de radio e internet que dio a principios de esta semana.