Tres mujeres fueron torturadas psicológica y sexualmente para forzarlas a admitir crímenes que las llevaron a una prisión en Baja California. Dos de ellas ya han logrado salir de la cárcel, pero una más continúa tras las rejas. Sus atacantes, que eran agentes antisecuestros, no solo permanecen sin castigo, sino que han sido promovidos dentro de la corporación. Esta es la historia de impunidad que ha llamado la atención internacional de la ONU.
El careo durante la audiencia fue brutal. De un lado, un agente de la Fiscalía General de Justicia de Baja California aseguraba a la jueza que Denís Chávez Mariscal mentía, que él no la torturó.
Detrás de las rejas, vestida con la ropa gris del penal de Ensenada, Denís Chávez le respondió, señalándolo enfurecida: “Si tú estuviste ahí me tuviste que haber escuchado ¿O tú fuiste uno de los que me golpeaste?”, gritó ese 29 de abril de 2022.