“La violencia contra los periodistas en México ha puesto a este país, en diversas ocasiones en los primeros sitios de la estadística mortal en el ejercicio de la libertad de expresión”.
El cuerpo de Roberto Figueroa, periodista morelense, fue encontrado la mañana del 26 de abril. Primero lo privaron de su libertad verdugos anónimos; como suele suceder cuando matan a periodistas, lo siguieron, lo espiaron, fueron por su vida cuando salió de su casa para llevar a sus hijos a la escuela. En algún momento del retorno lo interceptaron y se lo llevaron, es de suponer, con violencia.