La comunidad nahua de Santa María Ostula, Michoacán, se declaró en alerta por los ataques con explosivos y armas de fuego que integrantes del crimen organizado cometieron contra la población este miércoles, cuando agredieron a la población civil “sin distingo” y enviaron “grupos de alrededor de 50 criminales cada uno a rodear a una población desarmada e integrada principalmente por mujeres, niños y personas de la tercera edad”.
Los pobladores de Ostula responsabilizaron del ataque al Cartel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) y denunciaron que las agresiones comenzaron desde el pasado 1 de julio contra los puntos de vigilancia de la Guardia Comunal, pero que desde la mañana del miércoles se recrudecieron con “explosiones ocasionadas por drones así como detonaciones de armas de grueso calibre, en los cerros que rodean la encargatura de la Cofradía de Ostula”.