Guzmán López fue acusado por Estados Unidos en 2023 de narcotráfico y lavado de dinero junto con tres de sus hermanos, conocidos como los "Chapitos".
Joaquín Guzmán López, hijo del capo mexicano de las drogas Joaquín “El Chapo” Guzmán, se declaró no culpable en Chicago de cargos de narcotráfico, cinco días después de su arresto en una dramática operación en la que habría entregado al exsocio de su padre Ismael “El Mayo” Zambada a autoridades estadounidenses.
Guzmán López presentó la declaración en una audiencia de un tribunal federal de Chicago, ante la jueza de distrito estadounidense Sharon Johnson Coleman.