Fue el Estado. Esa es la conclusión que refuerza el informe final del Mecanismo para la Verdad y el Esclarecimiento Histórico de los hechos ocurridos entre 1965 y 1990. Los documentos modifican toda la narrativa sobre el episodio catalogado como “Guerra Sucia” y ponen énfasis en que hace falta que el Estado, en todos sus niveles, asuma su responsabilidad por la política de exterminio que afectó a miles de personas.
Ocho mil 594 víctimas. Once mil 743 violaciones graves a derechos humanos. Cuarenta y seis masacres con al menos a 385 víctimas mortales; 123 mil 034 personas forzadas a abandonar sus casas y territorio. Muchas más personas desaparecidas…
Ese es el saldo que dejó la Guerra Sucia en México, el episodio que se extendió de 1965 hasta 1990 y que tuvo como principal operador al Estado.