Lenia Batres, Yasmín Esquivel y Loretta Ortiz, cercanas a AMLO, desde un inicio se pronunciaron a favor de la reforma judicial, y así lo manifestaron abiertamente a sus pares en una Suprema Corte sumida ahora en la discordia y que reiniciará labores el 17 venidero.
La reforma judicial impulsada por el Ejecutivo y avalada por el oficialismo en el Legislativo dejó a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) profundamente divididos, con tres de ellas con la intención de mantenerse en la nueva configuración del máximo tribunal.
Se trata de Lenia Batres, Yasmín Esquivel y Loretta Ortiz, quienes no sólo se pronunciaron a favor de la reforma judicial, sino que ya alzaron la mano para ser candidatas durante la elección de juzgadores por voto popular.