Luego de participar en el Foro Oil & Gas, organizado por la firma alemana Siemens, el encargado de la política energética del país lanzó:
“Son contratos de largo plazo sustentados por el estado de derecho. Son contratos que no pueden romperse de manera arbitraria, eso llevaría el tema a instancias internacionales. Los contratos están garantizados por las leyes mexicanas. El que quiera cambiar la reforma energética, va a tener que cambiar la Constitución y se va a enfrentar a la realidad económica del país, a un modelo que nadie practica en el mundo”.