Aunque originalmente lo citaron para que diera explicaciones sobre las investigaciones en el robo a hidrocarburos, había un tema reciente y latente que no podían obviar: los señalamientos de espionaje a periodistas, defensores de los derechos humanos y activistas, hechos por instituciones académicas y medios como The New York Times, que se le hicieron al gobierno de Enrique Peña Nieto.
No es un tema fácil para cualquier funcionario, pero debería serlo para quien tiene la obligación de investigar los actos irregulares, los quebrantos a la Ley, y la corrupción en el Gobierno Federal.